El Gobierno de Venezuela expresó este martes que el canciller de Colombia, Luis Gilberto Murillo, no tiene «moral para hablar» sobre el país caribeño, luego de que este reiterara que su nación no reconocerá la victoria del presidente Nicolás Maduro en los comicios del 28 de julio hasta «disipar cualquier duda» sobre la «legitimidad» de los resultados electorales.
«Canciller Murillo, ni usted ni ninguna institución colombiana tienen el derecho y mucho menos la moral para hablar de Venezuela, no es un asunto que le incumba, definitivamente no es su problema», dijo en Telegram el ministro de Relaciones Exteriores del país caribeño, Yván Gil.
En ese sentido, instó al cese de «injerencias groseras y de buscar titulares que solo disfruta la derecha paramilitar y fascista».
«Aunque a la oligarquía colombiana, aliada con sus jefes gringos, les disguste los Gobiernos revolucionarios, como el del presidente Nicolás Maduro, acá el pueblo venezolano habló claro y fuerte. No le debemos explicaciones ni a usted ni a su decrépito Congreso, dedíquense a sus problemas, que bastante deben tener», agregó Gil.
Murillo, durante un debate en el Senado sobre la postura del Ejecutivo frente a las elecciones venezolanas, aseguró que Colombia plantea que, «para poder disipar cualquier duda, se debe dar el proceso de publicación de actas de votación» y «se debe demandar que haya veeduría internacional imparcial».
«El Gobierno colombiano respeta el principio de la soberanía e independencia de los Estados. Vamos a seguir trabajando y es algo que deben resolver los venezolanos y venezolanas, pero hay serias dudas de legitimidad y legalidad que se tienen que disipar, y eso solo se hace con lo que viene exigiendo Colombia», añadió el canciller.
Recientemente, el presidente colombiano, Gustavo Petro, señaló en una entrevista con CNN que Colombia y Brasil tienen una posición común: «si no hay presentación de actas, no hay reconocimiento».
Esos dos países, además de México, han intentado mediar en la crisis que vive Venezuela desde que el Consejo Nacional Electoral (CNE) anunciara la controvertida victoria de Maduro.
Entretanto, el antichavismo mayoritario -agrupado en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD)- insiste en que su abanderado, Edmundo González Urrutia, fue el ganador de las elecciones, y para sustentar su reclamo publicó en una página web el «83,5 % de las actas» que dice haber recabado el día de los comicios a través de personas que fueron testigos y miembros de mesa.
La semana pasada, tras una reunión con su homólogo colombiano al margen de la Asamblea General de la ONU, en Nueva York, Gil aseguró que Venezuela mantiene canales de comunicación «constantes» con el Ejecutivo de Petro.