(ARCHIVOS) La venezolana Yulimar Rojas compite en la final de triple salto femenino durante la reunión de atletismo de la Liga Diamante en el estadio Stadion Letzigrund de Zurich el 31 de agosto de 2023. Yulimar Rojas mantuvo su hegemonía en el triple salto en 2023, redoblando su compromiso con un nuevo salto olímpico oro en París 2024. (Foto de Fabrice COFFRINI / AFP)
Yulimar Rojas mantuvo en 2023 su hegemonía en el salto triple, redoblando su apuesta por un nuevo oro olímpico en París-2024.
Un cuarto campeonato mundial al aire libre y un tercer título en la Liga de Diamante fueron sus puntos cumbre en el año que termina.
“Esto no queda aquí. Esto es un avance y es un plus para lo que viene”, avisó Rojas después de ser elegida como Atleta Femenina del Año en eventos de campo por World Athletics.
“Premios como este son los que te hacen trabajar más fuerte y te hacen pensar en grande, pensar que las cosas van por el buen camino”, agregó, con su sonrisa y con su ambición de siempre, en un video que divulgó en redes sociales.
Ahora, esta carismática atleta de 28 años tiene por delante la posibilidad de seguir haciendo historia: jamás un deportista de su natal Venezuela ha podido colgarse dos medallas de oro en los Juegos Olímpicos.
Rojas se sumó en Tokio-2020 al boxeador Francisco ‘Morochito’ Rodríguez en México-1968, el taekwondista Arlindo Gouveia en Barcelona-1992 y el esgrimista Rubén Limardo en Londres-2012 en el exclusivo club de venezolanos que han ganado preseas de oro olímpicas.
16 metros en la mira
Dueña de la mejor marca mundial del año, 15.35 metros, Yulimar Rojas aspira a convertirse en la primera mujer que rompe la barrera de los 16 metros en el salto triple. Su récord mundial de 15.74, fijado en pista cubierta el 20 de marzo de 2022, avala ese objetivo.
La jamaicana Shanieka Ricketts, con 15.03, y la ucraniana Maryna Bekh-Romanchuk, con 15.00, fueron las únicas capaces de superar los 15 metros junto a ella en 2023.
Aunque sus rivales la miran desde muy lejos, la final del Campeonato del Mundo de Budapest, el pasado 25 de agosto, fue una advertencia: Rojas, después de todo, es humana.
La medalla de oro e incluso el podio estuvieron a punto de escaparse de sus manos y ganó la corona en un agónico último intento, en el que firmó un registro de 15.08, que celebró desplomada de rodillas, llorando de alegría, sacándose de encima una inmensa presión.
“La mejor Yulimar Rojas es la que nunca se da por vencida, la mejor Yulimar Rojas es la que se sobrepone y supera las adversidades (…). Ha sido una noche muy complicada para mí, pero he podido revalidar mi título”, expresó ese día la venezolana, que colecciona cuatro campeonatos mundiales al aire libre (2017, 2019, 2022 y 2023) y tres en pista cubierta (2016, 2018 y 2022).
Su mejor actuación llegó el 16 de septiembre en las finales de la Liga de Diamante, en Eugene, Estados Unidos, con su marca de 15.35, que le dio el título de esta competencia por tercer año corrido (2021, 2022 y 2023).
Boleto sellado
El 5 de julio, con un salto de 15.16, Rojas selló su boleto olímpico y se alzó con la medalla de oro de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador-2023.
“París está a la vuelta de la esquina y ya mi nombre está inscrito”, festejó entonces la caraqueña.
Si bien la corona de los Juegos Centroamericanos y del Caribe no es la que más brilla en el amplio palmarés de Rojas, ese triunfo tuvo un especial importancia para ella, pues se le había resistido hasta ese momento.
“La primera vez (Veracruz-2014), no salieron las cosas como quería; la segunda vez (Barranquilla-2018), no pude asistir porque estaba lesionada; y a la tercera es la vencida”, dijo.
Entrenada por el mito cubano Iván Pedroso, Rojas se ha planteado un reto extra, aún por cumplir, pues ha anunciado su deseo de competir en París-2024 en una prueba adicional al salto triple: el salto largo.
“Yo soy una mujer de retos (…), para mí doblar en unos Juegos Olímpicos es un sueño que voy a intentar hacer realidad”.
AFP