El Consejo de Seguridad Nacional de Ucrania ha anunciado que los funcionarios del Gobierno, el personal militar y los empleados de empresas e infraestructuras consideradas críticas no podrán tener instalado en sus teléfonos la aplicación de mensajería Telegram, ya que consideran que representa un peligro para la seguridad nacional.
Así se ha acordado en una reunión en la que el jefe de la Inteligencia militar ucraniana, Kirilo Budanov, ha alertado de que los servicios especiales rusos han logrado acceder a mensajes y datos personales de usuarios de Telegram, según un comunicado difundido al término de una reunión sobre ciberseguridad.
«Siempre estoy a favor de la libertad de expresión, pero con Telegram no se trata de un tema de libertad de expresión sino de seguridad nacional», ha dicho, para justificar una medida que contempla como única excepción que el uso de esta aplicación se deba a razones estrictamente profesionales.
Los expertos que participaron en la reunión han advertido de que Rusia se sirve de Telegram como herramienta para ciberataques, para difundir virus o geolocalizar a sus usuarios. La información obtenida le permitiría además ajustar posibles ataques en un contexto de bombardeos prácticamente diarios sobre las principales zonas de combate.