Este viernes 27 de septiembre iniciaron los trabajos previos a la instalación del primer puente tubular peatonal que unirá los distritos de Miraflores y Barranco. El proyecto forma parte del Corredor Turístico Miraflores – Barranco, cuya construcción implicará el cierre de dos carriles en la quebrada de Armendáriz, afectando el tránsito vehicular en esta zona clave de la ciudad.
Los conductores que transitan entre Miraflores y Barranco, así como aquellos que se dirigen hacia otros distritos como San Miguel, Magdalena, Callao y Chorrillos, comenzaron a experimentar las restricciones viales en la bajada de Armendáriz desde el día de hoy, 29 de septiembre. En este punto se ha generado un cuello de botella que afecta la circulación, especialmente para los vehículos que intentan mantener su velocidad normal en esta vía.
Los separadores viales colocados en la zona para delimitar las áreas de trabajo fueron derribados en varias ocasiones por conductores que no logran calcular la distancia con precisión, generando accidentes menores en el trayecto. A pesar del riesgo, no se ha identificado la presencia de personal de la Policía Nacional ni de agentes fiscalizadores de la Municipalidad en el área para regular el tránsito o advertir a los conductores sobre la situación.
Las labores relacionadas con el proyecto están programadas para extenderse durante siete días. Durante este tiempo, se prevé la demolición de parte de las bermas centrales, así como la habilitación de tres empalmes viales temporales que facilitarán el flujo de vehículos en la quebrada de Armendáriz.
Durante la primera fase del proyecto, se removerá 64 metros cuadrados de la berma, lo que afectará a los vehículos que transiten por las vías de descenso. En este tramo, solo estará habilitado un carril para el tránsito en ambas direcciones, tanto para aquellos que se desplacen hacia el norte, en dirección a distritos como Miraflores, San Isidro y Magdalena, como para quienes viajen hacia el sur, en dirección a Barranco y Chorrillos.
En la segunda etapa, se removerán 45 metros cuadrados adicionales de pista en la berma, lo que implicará una mayor afectación al tránsito, dejando habilitados únicamente dos carriles en la vía de ascenso hacia Armendáriz. Los conductores que utilicen la quebrada para descender hacia Barranco y Chorrillos también tendrán restricciones, con solo un carril operativo en cada sentido.
El tercer empalme se llevará a cabo en la berma central de Armendáriz, donde se removerán 14.54 metros cuadrados. En este tramo, se cerrarán ambos carriles centrales de la vía, tanto en subida como en bajada, hasta que se completen los trabajos de remoción y habilitación.
El inicio de la instalación del puente tubular peatonal está previsto para el 4 de octubre, cuando comience el proceso de izaje y montaje de la estructura. Esta fase del proyecto requerirá el uso de una grúa de gran escala, con capacidad para levantar hasta 650 toneladas. La grúa se posicionará en los cuatro carriles de ascenso de la bajada de Armendáriz, lo que afectará el tránsito en esta vía durante aproximadamente 30 días.
Durante este tiempo, solo estarán habilitados tres carriles para la circulación vehicular, los cuales funcionarán en horarios específicos. De 5 a.m. a 1 p.m., dos carriles estarán destinados al descenso hacia el Callao y Chorrillos, mientras que un solo carril permitirá el ascenso hacia Armendáriz. A partir de la 1 p.m. y hasta las 9 de la noche, los carriles se reorganizarán, permitiendo el ascenso hacia Armendáriz por dos carriles y un solo carril para el descenso. Por la noche, entre las 9 p.m. y las 5 a.m., la quebrada de Armendáriz permanecerá cerrada al tránsito vehicular.
La Municipalidad de Miraflores solicitó a los conductores y residentes que transitan por la quebrada de Armendáriz, especialmente aquellos que hacen uso diario de la Costa Verde, que tengan paciencia ante las molestias que los trabajos puedan generar. Las autoridades también recordaron que estas obras se financian con recursos asignados por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y que, una vez completadas, beneficiarán a miles de usuarios al mejorar la conectividad entre los distritos de Miraflores y Barranco.
La construcción del puente tubular peatonal forma parte de un proyecto más amplio para desarrollar un corredor turístico que impulse el flujo de visitantes entre Miraflores y Barranco, dos de los distritos con mayor atractivo turístico de la capital. Esta megaobra busca, además de facilitar el tránsito peatonal, mejorar la infraestructura vial y promover el turismo en la ciudad.
El proceso de instalación del puente es solo una de las fases iniciales del corredor turístico, y se espera que una vez finalizada la estructura, los distritos cuenten con un flujo de tránsito más ordenado y seguro. Durante el mes que durará el proceso de montaje, las autoridades han indicado que se mantendrán habilitadas las rutas alternas para minimizar el impacto en el tránsito vehicular.