La suspensión de relaciones diplomáticas entre los gobiernos de Panamá y Venezuela podría tener diversas repercusiones, según advierten desde el Palacio de las Garzas, tras exigir una mayor transparencia en el proceso electoral que dio como ganador a Nicolás Maduro.
“Los millones de venezolanos merecen que se respete la genuina voluntad popular. Los principios y valores democráticos no son negociables”, expresó este lunes el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, durante una declaración pública.
En ese sentido, agregó que, con la decisión de suspender relaciones diplomáticas con el Palacio de Miraflores, automáticamente cesarán las relaciones políticas entre ambos gobiernos.
De hecho, en los tiempos, las relaciones se habían tornado tan tensas hasta el punto que ambos gobiernos actualmente no cuentan con embajadores en sus respectivas delegaciones diplomáticas.
Sin embargo, el canciller de Panamá, Javier Martínez Acha aclaró que la suspensión de las relaciones solo se toma a nivel diplomático, por lo que se van a seguir manteniendo las relaciones consulares.
Impacto migratorio
Por otro lado, esta situación puede tener un impacto directo en la cuestión migratoria ya que, según pronosticó el mandatario panameño, es probable que haya un aumento de flujo de migrantes venezolanos que, ante una posible inestabilidad política y económica, decidan emprender una travesía hacia EEUU, lo que obliga a Panamá a velar por la situación en la frontera en la región del Darién.
“Ojalá me equivoque, pero esto va a incrementar el flujo de venezolanos por razones evidentes, y tenemos que adoptar ahí las decisiones que correspondan para salvaguardar su integridad y darle paso expedito a las personas que quieren emigrar hacia Estados Unidos”, detalló.
Se estima que en Panamá residen casi 100.000 venezolanos, que ven con preocupación la manera en que harán sus trámites migratorios.
El detonante en la relación diplomática
La frágil relación entre Panamá y Venezuela se ha dañado de forma más acentuada en los últimos días. En primer lugar, a raíz del cierre unilateral del espacio aéreo, por parte del gobierno de Venezuela, para vuelos de la aerolínea panameña Copa durante algunas horas del 26 de julio y que impidió el traslado de un grupo de expresidentes latinoamericanos a Venezuela para ejercer de observadores.
En segundo lugar, por el llamado que se hizo desde el Palacio de las Garzas para pedir mayor claridad en el proceso electoral venezolano, cuyo Consejo Nacional Electoral otorgó la victoria a Nicolás Maduro por más del 51 % de los votos.
“No podemos mirar para el otro lado, ante el intento de golpe institucional, a la decisión soberana del pueblo de Venezuela”, afirmó el presidente Mulino.
Según él, la suspensión de las relaciones diplomáticas con Venezuela se mantendrá hasta que se haga una revisión completa de las actas y se compruebe el buen funcionamiento del sistema informático del escrutinio que permitan conocer la genuina voluntad popular en el proceso electoral del 28 de julio.
“Se estila usualmente 72 horas, eso lo decide la cancillería como corresponda, no hay decisiones perfectas; algún tropiezo va a causar esta decisión no me cabe la menor duda, pero quiero que los venezolanos en Panamá tengan claro que no me queda otra opción”, admitió el mandatario panameño.
¿Qué pasará con la actividad comercial entre ambos países?
Para el analista José Stoute, a nivel comercial no se esperan mayores repercusiones.
En el caso de la Zona Libre de Colón y la deuda que mantiene Venezuela con los comerciantes de ese importante emporio comercial panameño (un poco más de 500 millones de dólares) tampoco se espera un mayor impacto.
“Esa deuda se ha ido pagando a goteos, y puede que se suspenda el pago. Si bien eso es una afectación para los empresarios de la Zona Libre, el presidente de Panamá ha considerado que es mucho más importante una postura firme del gobierno. Aunque se suspenda el goteo de pago, no creo que va a afectar significativamente a la Zona Libre de Colón”, aseguró Stoute.
En el caso de la aerolínea panameña Copa Airlines, hasta el momento no ha comunicado cambios en su actividad de vuelos hacia y desde Venezuela.
En cuanto al Canal de Panamá, por su posición de neutralidad, se descartarían repercusiones sobre el paso de buques con mercancía venezolana por el área. La Autoridad del Canal de Panamá no ha hecho declaraciones sobre este tema.
Se espera que Panamá solicite una reunión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), tal como lo establece su carta constitutiva y democrática, con el objetivo de convocar una reunión de cancilleres para discutir la situación de Venezuela.
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