El Ejército israelí bombardea hoy con fuerza el corazón de la ciudad de Tiro, la cual alberga ruinas romanas a las que UNESCO considera Patrimonio Mundial. Se trata de la ciudad más poblada del sur de Líbano, con unos 200.000 residentes. Pero el municipio también acoge en viviendas y en colegios miles de personas de municipios fronterizos que habían sido expulsadas por las bombas durante los 12 meses anteriores.
Israel ha lanzado una orden de expulsión por la mañana exigiendo la evacuación de un barrio céntrico de la ciudad y enseguida se han visto escenas de desesperación. Los equipos de Defensa Civil y de paramédicos de Líbano, con más de 100 bajas por misiles israelíes desde octubre de 2023, han patrullado la ciudad asegurándose de que todo el mundo hubiera recibido el aviso.
Israel asegura sin aportar pruebas que la zona bombardeada acogía centros de comando de Hezbolá. Se espera que la ofensiva contra Tiro provoque la llegada de multitud de personas a Beirut, donde ya hay miles que pasan las noches en las calles o en las playas de la ciudad.
Mientras, los combates continúan en el resto del sur de Líbano. Israel bombardea múltiples posiciones de forma simultánea y la milicia libanesa dispara contra lugares dentro de Líbano y en el norte de Israel donde las tropas israelíes están desplegadas. De hecho, el Ejército israelí dice haber interceptado solo en el día de hoy 5 aviones no tripulados.
Joan Cabasés Vega, Voz de América, Beirut