En vídeos difundidos recientemente en redes sociales, Adriana Torrealba, exesposa del youtuber venezolano Wender Enrique Villalobos Padrón, realizó graves acusaciones en su contra. Según su testimonio, durante su matrimonio y posterior separación, Villalobos exhibió un comportamiento violento y acosador que ha perdurado por años, hasta la actualidad.
El infierno de una relación tóxica
Torrealba relató cómo Villalobos la engañó al embarazar a su secretaria mientras estaban casados. «Por dignidad y amor propio» decidió separarse, pero esta decisión desencadenó un tormento interminable. «Él no aceptó que lo quisiera dejar y empezó a vandalizar el hogar donde vivíamos juntos», aseveró con voz temblorosa, evidenciando el estrés postraumático que la situación le provocó. Comentó además la indiferencia mostrada por Villalobos hacia la hija en común de ambos desde que la pequeña tenía dos años.
Las acusaciones de Torrealba pintan un cuadro inquietante. Según su testimonio, Villalobos vandalizó su casa en reiteradas ocasiones, incluso durante sus embarazos. En un acto de crueldad innecesaria, le quitó la vida a la mascota que habían criado juntos como pareja. «Esa perrita era nuestra hija y él la mató», lamentó con profunda angustia.
Amenazas y acoso constante
Pero el tormento no terminó con la separación. Torrealba afirma poseer pruebas contundentes de cómo Villalobos continuó acosándola y amenazando a su familia. «Tengo videos, fotos y mensajes en los que amenaza a todas las personas de mi familia, diciendo que tiene la dirección de todos», reveló con preocupación.
A pesar de haber denunciado a Villalobos en numerosas ocasiones, Torrealba se topó con un muro de indiferencia. Según explicó, su exesposo trabajaba como comisionado en la policía del estado Anzoátegui, lo que aparentemente obstaculizaba el curso de la justicia. «Cada vez que ponía una denuncia, no se me tomaba en cuenta», lamentó con frustración.
Ese panorama de impunidad ha llevado a Torrealba a buscar justicia a través de otros medios, como las redes sociales, donde ha publicado pruebas de las amenazas y el acoso continuado.
Según Torrealba, su expareja orquestó una campaña de hostigamiento implacable en su contra. «Me mandaban muchos mensajes amenazantes, me hackeaban la cuenta, me hackeaban el teléfono, con ayuda de Jonathan Rondón», afirmó. Villalobos, aparentemente obsesionado con controlarla, le advertía: «No puedes tener cuenta, no puedes hablar con nadie, todos los teléfonos que tengas, todos voy a revisar y voy a ver con quién hablas».
Torrealba relató cómo Villalobos intentó sabotear su nueva relación sentimental al difundir la falsa información de que ella portaba el VIH, virus causante del SIDA. «Él va y le dice a esa persona que yo tengo VIH. Y entonces esa persona le dice, si ella tiene, tú también lo tienes. Y él le dijo, claro, yo lo tengo. Yo soy portador», narró con angustia.
La despiadada mentira sumió a Torrealba en un tormento psicológico indescriptible, llevándola a someterse a innumerables pruebas de laboratorio para descartar la enfermedad, a pesar de los resultados negativos. «Yo pensaba que no, que era que estaban mal hechos y yo me los repetía y me los repetía pensando que yo tenía esa penosa enfermedad», confesó.
El acoso y la intimidación no se limitaron a Torrealba. Según su relato, aquellos que intentaban protegerla o apoyarla también se convirtieron en blancos de las represalias de Villalobos. En un incidente particularmente perturbador, una vecina que cuidaba la casa de Torrealba fue víctima de un robo y su hija fue violada. Torrealba culpa directamente a Villalobos, sugiriendo que su obsesión por atormentarla no conocía límites.
En un intento desesperado por incriminar a Torrealba, Villalobos llegó al extremo de autoatentarse y luego culparla a ella y a su nueva pareja. «Él dijo que la pareja que yo tenía en esa época y yo, le habíamos mandado a tirotear el carro. Resulta que hablando yo con las personas del CICPC (policía judicial) que desconocían todo el historial de este enfermo mental, ellos me dicen que si él posee un arma, yo le digo que sí y el calibre de arma. Y ellos descubren que él mismo se tiroteó su carro para culparme a mí», reveló Torrealba.
Las consecuencias del tormento infligido por Villalobos han dejado profundas cicatrices en Torrealba. «Debido a los maltratos que tengo psicológicos, verbales y también el maltrato físico hacia mí, tengo problemas de cervical, tengo problemas de los nervios», lamentó. Incluso presentó pruebas de que Villalobos ha exhibido un comportamiento abusivo con otras personas cercanas.
Otros detalles inquietantes
En su relato desgarrador, Adriana Torrealba no solo expuso los abusos que sufrió a manos de su exesposo, Wender Villalobos Padrón, sino que también hizo referencia a un presunto comportamiento violento hacia Marjorie, quien posteriormente se convirtió en la pareja sentimental del youtuber.
Torrealba afirmó conocer sobre el maltrato verbal y psicológico que Villalobos ha ejercido sobre Marjorie. «No digas que no eres un maltratador porque no han salido videos donde tú me maltrates a mí, pero por ahí anda un video donde tú maltratas a Marjorie», declaró con firmeza.
Según Torrealba, en el video en cuestión, Villalobos se dirige a Marjorie con insultos denigrantes, refiriéndose a ella como «mosca muerta», en un evidente maltrato verbal y emocional.
Además, Torrealba describió cómo en el video, Villalobos amenaza a Marjorie y la presiona para que le abra la puerta rápidamente. Este comportamiento intimidante, sumado al hecho de que Marjorie aparentemente temblaba de miedo mientras el incidente era grabado, sugiere un ambiente de control y abuso dentro de la relación.
La existencia de este video y las acusaciones de Torrealba apuntan a un posible patrón de conducta violenta por parte de Villalobos, que no se limitaría a su expareja. Las palabras de Torrealba son un indicador alarmante de que el youtuber ha recurrido a tácticas de intimidación y maltrato en más de una relación sentimental.
Órdenes de aprehensión en Venezuela
Actualmente, Wender Enrique Villalobos Padrón enfrenta una orden de captura por violencia de género en Venezuela, luego de que Torrealba formulara la denuncia correspondiente en 2015. Los cargos incluyen violencia psicológica, patrimonial, amenazas, acoso y violencia física contra su expareja. Contra Villalobos también existe otra orden de arresto por parte de autoridades venezolanas, por su presunta implicación en un complot conocido como «Brazalete blanco», que tenía como fin asaltar una brigada del Ejército Bolivariano y provocar un estallido de violencia en Venezuela.
A pesar de las graves acusaciones y procesos legales en su contra, Villalobos ha mantenido una presencia activa en YouTube, donde intenta posicionarse como una voz crítica de la oposición venezolana. No obstante, sus detractores lo acusan de difundir información engañosa y manipulada, lo que ha generado una base de seguidores que, según los críticos, están siendo mal informados.
Villalobos, quien otrora fue un abierto simpatizante chavista, ha intentado presentarse como una supuesta voz de autoridad dentro de la oposición venezolana, a través de sus podcasts en YouTube. Sin embargo, las graves acusaciones en su contra proyectan una sombra oscura sobre su credibilidad y ponen en tela de juicio su intento de mostrarse como un perseguido político. El youtuber, no obstante, por lo regular, trata de desviar la atención, asegurando que las denuncias y acusaciones en su contra son supuestas maniobras y «montajes» del «régimen», mostrándose como una aparente víctima de complots políticos.