La mayoría de las personas experimentaron alguna vez un déjà vu
La expresión déjà vu se globalizó. Se usa en todas partes del mundo. En francés significa “ya visto” y resume un fenómeno peculiar que ocurre con la memoria, pero mucho más habitual de lo que uno creería. Tan recurrente es que las investigaciones aseguran que el 97% de las personas tuvo un déjà vu al menos una vez en su vida y que el 67% lo experimenta con regularidad.
Por Infobae
Definiciones técnicas hay muchas. Una de las más aceptadas es la que propuso el doctor Vernon Neppe en 1983. “Cualquier impresión subjetivamente inapropiada de familiaridad de una experiencia presente con un pasado indefinido”. En otras palabras, se trata de experimentar una familiaridad extraña con un lugar, un evento, una persona o incluso un sentimiento que, en realidad, nunca antes habíamos tenido en el pasado.
Casi todos los estudios coinciden en que la frecuencia de déjà vu disminuye con la edad y que el punto máximo con alrededor de 2,5 experiencias por año se alcanza en adultos jóvenes, de entre 20 y 24 años. Luego la asiduidad se reduce hasta convertirse en sucesos excepcionales.
“Una posible explicación podría basarse en la plasticidad del cerebro joven, que está más activo y en proceso de formar nuevas conexiones neuronales. Esto podría hacer que los jóvenes sean más susceptibles a las discrepancias en la percepción y el reconocimiento que conducen al déjà vu”, explicó en diálogo con Infobae Francisco Esteban Ruiz, profesor titular de Biología Celular de la Universidad de Jaén, España. “Además hay que tener en cuenta que los jóvenes pueden estar más abiertos a compartir y discutir tales experiencias, mientras que los adultos mayores podríamos ser menos propensos a reportarlas”, agregó.
¿A quién no le pasó caminar por una ciudad que hasta entonces nunca había visitado y sentirse como en casa, como si conociera cada uno de sus rincones? ¿O cruzarse a una persona por primera vez y tener la sensación de que en el pasado compartieron múltiples momentos? ¿O sentirse invadido por una emoción nueva y reconocerla como familiar, como si fuera un sentimiento habitual?
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