Un primer avión estadounidense arribó el miércoles al aeropuerto internacional Simón Bolívar, que sirve a Caracas, con estos venezolanos deportados, como parte de un acuerdo al que llegó Washington con el gobierno del presidente Nicolás Maduro, con quien no tiene relaciones formales.
«Estos ciudadanos(as) recibieron la atención y abordaje social integral por parte del Estado y del gobierno venezolano, en materia de salud, abordaje psicológico, traslado y además registramos sus denuncias por maltratos recibidos durante sus detenciones en Estados Unidos», escribió el ministro Ceballos en la red X, antes Twitter.
«Tres de las personas que arribaron quedaron detenidas por encontrarse solicitados ante Siipol (Sistema de Investigación e Información Policial, ndlr), a quienes se les garantizará el debido proceso y sus derechos humanos», añadió.
El acuerdo permite el envío de vuelos charter a Venezuela para «la repatriación ordenada, segura y legal» de migrantes «que no tienen base legal para permanecer en Estados Unidos».
Biden, que busca la reelección en 2024, encara una fuerte presión por parte de republicanos, que le acusan de haber causado una crisis migratoria en la frontera con México, e incluso de algunos demócratas tras el desbordamiento de varias ciudades bajo su mando por la llegada de migrantes.
Ceballos informó el miércoles que 131 venezolanos llegaron en este primer avión, pero la cifra fue corregida luego a 127.
Maduro informó luego que estos vuelos serán semanales.
Venezuela rompió relaciones con Estados Unidos en 2019, después de que Washington desconociera la reelección de Maduro, celebrada un año antes, tachándola de fraudulenta. Hasta la ruptura, los migrantes venezolanos sujetos a deportación eran enviados en vuelos comerciales, y después, por un tiempo, a México.