
Familiares y amigos de Ricardo Prada Vásquez, un migrante venezolano que fue detenido por las autoridades migratorias de Estados Unidos en el mes de enero, denunciaron su desaparición. Y es que aparentemente no se encuentra en ningún centro de detención en territorio estadounidense, no aparece en las listas de migrantes enviados a El Salvador y tampoco ha sido repatriado a Venezuela.
Prada Vásquez, de 32 años de edad, fue detenido el 15 de enero luego de que por equivocación giró hacia el puente Ambassador, que lleva a Canadá, mientras trabajaba como repartidor en la ciudad de Detroit, Michigan. Cuando intentó volver a entrar al país, las autoridades lo apresaron porque el uso de la aplicación CBP One le había permitido ingresar una vez en noviembre de 2024, pero no tenía permiso para entrar una segunda.
Javier, un amigo del joven que se encuentra en Chicago, contó al New York Times que la siguiente vez que tuvo noticias de Prada se encontraba en el centro penitenciario del condado de Calhoun, al oeste de Míchigan. Tras no encontrar un abogado para defender su caso, se ordenó su deportación el 27 de febrero. Lo trasladaron a un centro del ICE en Ohio y luego al centro de detención de El Valle, en el sur de Texas.
Familiares claman respuestas sobre migrante venezolano desaparecido
El 15 de marzo, Prada llamó a Javier y le dijo que parecía que las repatriaciones a Venezuela eran inminentes y que él podría estar incluido. Esa noche, las autoridades federales trasladaron tres aviones con migrantes a El Salvador, y los funcionarios del gobierno de Trump afirmaron que los hombres eran miembros del Tren de Aragua, una banda criminal venezolana.
El migrante venezolano no figura en la lista de 238 personas que fueron deportadas a El Salvador aquel día. Tampoco aparece en las fotos y videos difundidos por las autoridades de hombres encadenados con la cabeza rapada.
La ausencia de Prada ha suscitado la preocupación de que se haya deportado a El Salvador a más migrantes de los que se sabía. También plantea la cuestión de si algunas personas deportadas pueden haber sido enviadas a otros países sin que haya quedado constancia de ello. Las autoridades estadounidenses han confirmado que fue expulsado de Estados Unidos, pero se desconoce su paradero.
La familia de Prada no puede acudir a los tribunales porque snombre no figura en la lista de personas de los vuelos, ni aparece en ningún otro lugar del sistema de registro del gobierno estadounidense de migrantes que han sido detenidos o deportados. Las autoridades venezolanas tampoco han encontrado ninguna información sobre él, según familiares.
Together and Free, una organización sin fines de lucro que ayuda a las familias de deportados, buscó en la base de datos de acceso público del ICE, se puso en contacto con el centro de detención de Texas, consultó con la oficina de campo y la sede central del ICE correspondientes y revisó las listas de reclusos de las cárceles. Sin embargo, Prada no aparece y sus familiares padecen la angustía de no tener si quiera una fe de vida del joven.
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