El hombre que irrumpió en la casa de la expresidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos Nancy Pelosi en 2022 y agredió a su marido con un martillo fue condenado el viernes a 30 años de prisión, informó el diario San Francisco Chronicle.
En un ataque por motivos políticos, David DePape entró por la fuerza en la casa de Pelosi en San Francisco a primera hora de la mañana del 28 de octubre de 2022, una semana antes de las elecciones al Congreso. En ese momento, la entonces presidenta de la Cámara de Representantes se encontraba en Washington.
El asaltante, un ciudadano canadiense que vive ilegalmente en Estados Unidos y que según los fiscales se dejaba llevar por las teorías conspirativas de extrema derecha conocidas como QAnon, reconoció en el testimonio del juicio que su intención era tomar a Pelosi como rehén.
DePape, de 44 años, se encaró al marido de Pelosi, Paul, de 82, y le golpeó en la cabeza con un martillo antes de ser reducido por la policía, que había sido llamada al lugar. En noviembre, un jurado lo declaró culpable de intento de secuestro de un funcionario federal y de agresión a un familiar directo de uno.
La víctima sufrió fracturas de cráneo y otras lesiones que siguen afectándole, según describió en una carta al juez antes de la sentencia del viernes. Además de mareos y una placa de metal en su cabeza, dijo que tiene problemas de equilibrio y daños permanentes en los nervios de la mano izquierda.
En una carta separada, Nancy Pelosi, la primera mujer en presidir la Cámara de Representantes, instó al juez a imponer un castigo «muy largo» contra DePape, cuyo abogado había pedido una condena de 14 años, alegando que se había «desequilibrado» en los años previos al ataque debido, en parte, a una relación abusiva.
La política demócrata señaló que, al parecer, DePape gritó «¿Dónde está Nancy?» al entrar en su casa, lo que algunos intrusos vociferaron en el Capitolio el 6 de enero de 2021, cuando una turba de partidarios del entonces presidente Donald Trump irrumpió en el edificio tratando de anular la elección de Joe Biden.
En los documentos judiciales, el Departamento de Justicia argumentó que, aunque no había sido condenado por un delito de terrorismo, sus delitos se ajustaban a la definición porque pretendía afectar al Gobierno mediante «intimidación o coacción» Los fiscales, que habían pedido 40 años de cárcel, dijeron que DePape no había mostrado remordimiento por sus actos.
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