Quienes posean propiedades e inversiones de alto valor, podrían tener que dar un porcentaje al gobierno. Colton Duke / Unsplash
Pese a que California y Nueva York ya son algunos de los lugares con impuestos más altos de Estados Unidos, debido a múltiples factores adversos que han derivado en una crisis fiscal, las autoridades analizan la posibilidad de establecer nuevas obligaciones para lograr recaudar más dinero, pero los analistas consideran que estas políticas afectarían a los propietarios más adinerados.
Por La Nación
En California, por ejemplo, la propuesta contempla cobrar entre 1% y 1,5% sobre el patrimonio total en el caso de personas que tengan una riqueza total superior a los 50 millones de dólares. Mientras que Nueva York, evalúa gravar a los multimillonarios por las ganancias de capital no realizadas, lo que genera debate sobre cómo se manejarían las pérdidas de valor posteriores.
Además, se analiza aumentar los impuestos sobre aquellos residentes que tengan ingresos anuales superiores a US$450 mil. Con estas acciones, se busca una respuesta contundente a la caída de 25% en ingresos fiscales y corregir un déficit proyectado de US$10 mil millones para el próximo año; mientras se intenta no recortar gastos esenciales.
La idea de tener un impuesto sobre el patrimonio no es nueva, en el pasado, políticos como el senador Bernie Sanders y la senadora Elizabeth Warren ya han propuesto proyectos de ley similares para obtener dinero de los ciudadanos más ricos, pero históricamente, Estados Unidos ha dependido principalmente de gravar los ingresos anuales para recaudar ingresos.
Las propuestas más recientes datan de enero de 2023 y se comenzaron a discutir en California, Nueva York, Illinois, Hawái, Maryland, Minnesota, Washington y Connecticut, de acuerdo a un reporte de Associated Press. Sin embargo, hasta ahora ninguna modificación ha visto la luz.
“Muy pocos contribuyentes pagarán impuestos sobre el patrimonio, pero muchos más pagarían el precio”, dijo en ese entonces el grupo conservador Tax Foundation. Sin embargo, los demócratas que impulsaron los proyectos descartaron cualquier afectación debido a los impuestos más altos.
El riesgo de una “fuga de riqueza”
El experto en información financiera de la cadena CNBC, Robert Frank, explicó que la decisión de implementar impuestos sobre el patrimonio, resulta especialmente compleja si se trata de una medida a nivel estatal, porque bastaría simplemente con mudarse a un estado vecino con impuestos más bajos para evitar los cargos, lo que daría como resultado una “fuga de riqueza”.
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