El router debe ubicarse en una zona central del hogar para que se distribuya mejor la señal. | Foto: Getty Images
La conexión a Internet en el hogar se convirtió en necesidad para muchas personas, especialmente, para aquellas que trabajan o estudian mediante la modalidad virtual. De igual manera, también están quienes acuden a este servicio con fines de entretenimiento, ya sea para ver películas vía streaming o consumir otros contenidos presentes en la red.
Por Semana
Al momento de contratar el servicio de Internet en el hogar, las compañías encargadas instalan un pequeño aparato conocido como router, el cual se encarga de distribuir la conexión entre los dispositivos que se conectan mediante cable o de manera inalámbrica.
Por lo general, la ubicación del router se define por la cercanía a una fuente de poder o en virtud de la comodidad del usuario, sin embargo, hay un detalle que no muchos conocen: su localización podría incidir en la potencia de la red wifi.
Contrario a la conexión directa mediante cable, la distancia juega un papel clave en cuanto a la potencia del wifi. Entre más lejos está el dispositivo del router, menor será la intensidad con que capte la red.
Según detalla el portal Computer Hoy, la señal wifi se propaga en todas las direcciones desde el router, creando una especie de burbuja de cobertura. En ese orden de ideas, la existencia de obstáculos, como las paredes, también debilita la intensidad con que el dispositivo receptor capta la red.
Teniendo en cuenta esta dinámica, es posible que si el router se encuentra en una posición demasiada baja, la señal se tope con más obstáculos -como muebles, por ejemplo-. En la otra cara de la moneda, si el router se ubica demasiado alto, la señal también se debilitará al tener que descender demasiado hacia los dispositivos.
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