La administración de Nicolás Maduro condenó este martes el genocidio de Israel contra el pueblo palestino en el bombardeo de este martes sobre el campo de refugiados de Yabalia, en el norte de la Franja de Gaza, por el que murieron, al menos, 145 personas, según dijeron a EFE fuentes hospitalarias.
«Venezuela, una vez más, repudia la sistemática violación a los principios contemplados en el derecho internacional humanitario y la inobservancia de las disposiciones de los convenios de Ginebra por parte de la potencia ocupante de Israel, lo que constituye un crimen de guerra que debe ser investigado de manera independiente por instancias internacionales», dijo en un comunicado.
La cancillería madurista reiteró su llamado a «establecer un alto al fuego de inmediato, detener las atrocidades cometidas por parte de Israel contra poblaciones civiles y a la búsqueda de soluciones inmediatas, en concordancia con las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que permitan la paz, la seguridad y la dignidad de los habitantes del territorio palestino».
Un responsable de Relaciones Públicas del Hospital Indonesio explicó a EFE que los bombardeos se produjeron sobre las 13:00 GMT.
Según el Ejército israelí, en el bombardeo de Yabalia murió también Ibrahim Biari, el comandante del Batallón Central Jabaliya del grupo islamista palestino Hamás.
Según Israel, Biari fue otro de los mandos de Hamás responsables de enviar milicianos de élite a Israel para cometer los ataques del 7 de octubre, que dejaron al menos 1.400 muertos.
Junto con Biari, cayeron también muchos miembros de Hamás, indicó el portavoz militar israelí, el contralmirante Daniel Hagari.
En los bombardeos que Israel lleva a cabo sobre Gaza desde el pasado día 7, han muerto más de 8.300 personas y más de 21.000 han resultado heridas, según el ministerio de Sanidad gazatí.
