El Gobierno de Venezuela lamentó este lunes el «devastador terremoto» que ocurrió el sábado en la provincia de Herat, en el oeste de Afganistán, y por el que el Gobierno de facto de los Talibanes calcula, hasta el momento, «4.500 víctimas» entre muertos y heridos.
«El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela expresa su dolor ante el devastador terremoto de magnitud 6,3 grados en la provincia de Herat, ubicada al oeste de Afganistán», dijo el canciller venezolano, Yván Gil, en un mensaje publicado en su cuenta en la red social X (antes Twitter).
Gil transmitió las condolencias del Ejecutivo por la muerte de más de 2.000 personas, además del cuantioso número de heridos y de daños materiales.
Afganistán sintió en la jornada del sábado al menos siete temblores. El primero de todos, el de mayor magnitud, ocurrió a 14 kilómetros de profundidad y a 33 kilómetros de la ciudad de Zindah Jan, ubicada en la provincia de Herat, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés).
Otros tres sismos de hasta 5,1 de magnitud han sacudido este lunes la misma región mientras tienen lugar las operaciones de rescates.
Incluso en Herat, capital de la provincia homónima, las personas han decidido dormir en las calles ante el temor de una nueva catástrofe.
Hasta ahora, el balance estimaba que 2.400 personas murieron y más de 2.000 resultaron heridas pero, este lunes, el portavoz del Ministerio de Gestión de Desastres del Gobierno de los talibanes, el mulá Janan Sayeq, aseguró que «aproximadamente ha habido más de 4.500 muertos y heridos», y que «es difícil señalar el número exacto».
El portavoz pidió a todas las organizaciones humanitarias que tiendan su mano y ayuden a las operaciones de rescate.
EFE