Un escrito en la puerta de la Unidad de Rayos X del Hospital Central de San Cristóbal (HCSC), el más importante del occidente de Venezuela, informa a los usuarios que el servicio está suspendido. Se supo que la unidad quedó inoperativa desde el 31 de diciembre, motivo por el cual ahora los pacientes deben acudir a clínicas privadas para hacerse estos estudios.
Tras realizar un recorrido por el área, se conoció que el aparato que da la imagen de Rayos X sufrió un daño, lo que imposibilita que el personal desarrolle sus labores.
Este es uno de los espacios más concurridos del primer centro asistencial de la región. Fuentes internas del nosocomio indicaron que este servicio atiende a más de 50.000 personas cada año, por lo que los equipos requieren de constante mantenimiento.
Hasta el año pasado, la Cruz Roja Internacional era la que venía desarrollando los debidos mantenimientos a dichos equipos. Sin embargo, ni la dirección del Hospital Central de San Cristóbal ni Corposalud han ofrecido una información oportuna al respecto.
Mientras tanto, los familiares de los pacientes han tenido que recurrir a servicios de Rayos X privados, cuyos costos oscilan entre 60.000 y 200.000 pesos (15 y 50 dólares), dependiendo de cada caso.