En lo que va de 2024, más de 176.000 venezolanos han atravesado la peligrosa selva del Darién, en su intento por llegar a Estados Unidos.
Esta cifra representa un 30% menos en comparación con el mismo periodo de 2023, pero sigue siendo alarmante, ya que dos tercios de los migrantes que cruzan este paso provienen de Venezuela.
«No quería irme, pero me iban a matar»
Oswards Ruíz, uno de esos migrantes, relata que se vio obligado a dejar su país tras la supuesta reelección de Nicolás Maduro, temiendo por su vida.
«No quería irme, pero me iban a matar», cuenta Ruíz, quien, como miles de venezolanos, decidió cruzar la selva panameña junto a un amigo.
El gobierno de Panamá, en colaboración con organizaciones internacionales, ha establecido centros de recepción temporal, como el de Lajas Blancas, donde los migrantes reciben asistencia antes de continuar su ruta hacia Costa Rica y, eventualmente, Estados Unidos.
Sin embargo, el cruce de la selva sigue siendo un desafío mortal.
Ruíz afirma haber presenciado cadáveres durante el trayecto, mientras que Rosa Pérez, otra migrante, perdió contacto con un miembro de su grupo tras ser arrastrado por un río.
La selva del Darién, un corredor clave para los migrantes que huyen de la crisis venezolana, sigue cobrando vidas a pesar de los intentos por bloquear pasos irregulares.
El presidente panameño, José Raúl Mulino, ha expresado su preocupación por el aumento de migrantes venezolanos tras la cuestionada reelección de Maduro. Y aunque las autoridades han deportado a migrantes de otras nacionalidades, los venezolanos continúan su travesía debido a la prohibición de vuelos panameños impuesta por Caracas.
A pesar de los peligros, la migración desde Venezuela sigue en aumento.
«Mientras siga este gobierno, más personas van a salir del país, porque se están muriendo de hambre», sentencia Marcos Arcilla, otro venezolano que cruzó el Darién en busca de una vida mejor.
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!